Abrir, cerrar y guardar en el editor vi / vim

Para abrir el editor vim, generalmente, tenemos dos opciones, escribir vi o escribir vim:

vi
vim

Esto es porque aunque actualmente se utilice más vim que vi, la vieja guardia que comenzamos usando vi, estamos acostumbrados a escribir sólo vi. Y ahorra un carácter, lo cual es muy de agradecer cuando se abre muchas veces el editor. Además, el usuario de vi, por la propia naturaleza del editor, suele buscar la mayor eficiencia.

En caso de que al escribir vi no se abra el editor, y sí al escribir vim, podemos editar el fichero ~/.bashrc y añadir la siguiente línea:

alias vi='vim'

Podemos abrir el editor vacío escribiendo vi o vim, o podemos abrir un fichero escribiendo su nombre:

vi fichero

En caso de que ese fichero que le indicamos como parámetro a vi no existiera, vi se abrirá con un fichero vacío, pero no lo creará a menos que lo guardemos.

También podemos abrir varios ficheros a la vez y que los muestre en una pantalla dividida horizontalmente, añadiendo el parámetro -o (minúscula) o bien en pantalla dividida verticalmente con -O (mayúscula):

vi fichero fichero2 -o

Para salir de vi, si no hemos realizado ningún cambio, podremos ir al modo comando con «ESC» y escribir:

:q

Pero puede ser que hayamos modificado algo y no queramos guardarlo, por lo que tendremos que forzar la salida con:

:q!

En caso de que queramos guardar los cambios, sin salir, hay dos opciones, que los queramos guardar con el nombre actual del fichero, que lo haremos con:

:w

O con otro nombre:

:w nuevo_nombre

Si queremos guardar y salir, podemos unir los dos comandos, w y q:

:wq

O, para optimizar un poco más el esfuerzo:

ZZ

 

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